La casa
Jenny Paola Bernal
Bienvenido a esta casa
su casa
se respira el frío hiel
de ese aliento ausente.
Bienvenido a esta casa
de enojos y lágrimas
bien pueda siéntese donde sus pasos se agoten
donde su piel se seque,
la casa ha cambiado un poco
-usted perdone-
pero he evitado pintarla
para que las grietas del tiempo
le regalen un poco de ese matiz familiar.
Es la misma casa no se asuste
esa misma que construimos hace tiempo
esperando estar lo suficientemente solos
para habitar en ella.