Su lengua no cabe en las letras
de este abecedario; ni eran las de Sound of Music
las notas de las canciones de su infancia.
Las casas de su pueblo cuelgan ahora
de las paredes de este bar
y se le han deshecho varios rasgos
de sus vecinos de tan lejos.
(Te anda buscando con el propósito
de que le restituyas las huellas).
Sus pasos y sueños aún le acompañan,
colorea sus días con cada uno de ellos.
En el bar, azul para charlar;
en la mesilla, el naranja de las buenas noches;
el rojo en los enfados para desahogarse.
¿Lo sabrán ellos? ¿o pensarán
que descastado su pueblo encalló
de negro en la otra ribera?
(Te anda buscando,
te dije, en este naufragio de aguarrás para pintarse).
Patricia Sanchez
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