“Los Jaguares de Tulúm”
Tulúm, una ciudadela fortificada de losMayas, construida encima de las rocas costeras que miran
hacia el Caribe, y tan impresionante, que los conquistadores decidieron pasar de lado.
Jaguares pétreas acechan desde un laberinto de leyendas
y como memorias alejadas del tiempo
que se derraman hacia la distancia,
sus largas sombras se estiran hacia el mar
y su silencio se suspende entre dos mundos.
Y en el atardecer, me derrito en el fulgor
de jaguares nacidos de oro líquido
y mi alma se devuelva
a través de las enigmas de serpientes emplumadas,
a donde los jaguares de carmín y negro son inmolados,
mientras el viejo sol se ahoga
entre las nubes sangrientas de la ceñuda oscuridad,
y el murmullo del océano es el único sonido.
Tulúm,
donde las águilas de pétreas corazones,
en su vuelo eterno, se olvidan del tiempo,
y la mariposa obsidiana aletea
a través del universo se los mitos perdidos
en la eternidad ingrávida.
Isabel Crooke
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