Suicidio
Anni Giovanna Reyes
(Colombia)
(Colombia)
Quiero intentar deslizarme por entre tu camisa, sujetar tus ojos en mi
mirada y sentir que la fuerza que me agobia escapa de mi entre los besos y las
caricias que te quiero dar. No es suficiente con encontrar tu recuerdo tatuado
en mi cerebro, padeciendo horribles tormentos al querer dormir, y me es
insuficiente tener que pasar en vela, recorriendo las instancias de la
habitación en busca de sosiego. Deseo mirarte tangible frente a mí, y saber que
existes más allá de esta tribulación absurda que me consume y calcina la poca
razón que aún me queda. Pero ausente transcurren las horas, que en interminable
espera debo soportar. Amanece de nuevo y el sol radiante entra por la ventana,
mientras mi alma no disipa la tormenta gris de lluvia y soledad, que alberga en
sí misma la desesperación de amarte, y amarte con este dolor obsesivo que
enferma cualquier razonamiento. No puedo soportar la espera del desconcierto, y
mi cuerpo que arde de amor sucumbe frente a tu recuerdo, ¿qué más debo hacer?,
en vano espero una palabra que no llega, en vano siento un amor que enfermizo
me mata a cada instante, sujetando entonces esta pena, he de arrojarme al
abismo y por fin asesinar de un tajo este horrible dolor, del que no eres
responsable. Infame canalla que enveneno mi alma de amor y deseo, de muerte y
soledad.
mirada y sentir que la fuerza que me agobia escapa de mi entre los besos y las
caricias que te quiero dar. No es suficiente con encontrar tu recuerdo tatuado
en mi cerebro, padeciendo horribles tormentos al querer dormir, y me es
insuficiente tener que pasar en vela, recorriendo las instancias de la
habitación en busca de sosiego. Deseo mirarte tangible frente a mí, y saber que
existes más allá de esta tribulación absurda que me consume y calcina la poca
razón que aún me queda. Pero ausente transcurren las horas, que en interminable
espera debo soportar. Amanece de nuevo y el sol radiante entra por la ventana,
mientras mi alma no disipa la tormenta gris de lluvia y soledad, que alberga en
sí misma la desesperación de amarte, y amarte con este dolor obsesivo que
enferma cualquier razonamiento. No puedo soportar la espera del desconcierto, y
mi cuerpo que arde de amor sucumbe frente a tu recuerdo, ¿qué más debo hacer?,
en vano espero una palabra que no llega, en vano siento un amor que enfermizo
me mata a cada instante, sujetando entonces esta pena, he de arrojarme al
abismo y por fin asesinar de un tajo este horrible dolor, del que no eres
responsable. Infame canalla que enveneno mi alma de amor y deseo, de muerte y
soledad.
Veo en el horizonte tu mano blanca y fina que se tiende frente a mí,
envuelta en la neblina de las aguas putrefactas del Tequendama, he de morir de
a poco, si las piedras aún no me sujetan provocando que me desnuque en una de
ellas. Mientras ocurre, siento que en vano me he arrojado, pues aún veo tu mano
queriendo sujetarme, y el amor dolorido que recorre mi ser no quiere morir, sin
importar que tanto duela el cuerpo al caer, mi alma no siente alivio de tu
amor. He de perecer por siempre viendo tu mano sin alcanzarme y mi amor sin
poder morir.
envuelta en la neblina de las aguas putrefactas del Tequendama, he de morir de
a poco, si las piedras aún no me sujetan provocando que me desnuque en una de
ellas. Mientras ocurre, siento que en vano me he arrojado, pues aún veo tu mano
queriendo sujetarme, y el amor dolorido que recorre mi ser no quiere morir, sin
importar que tanto duela el cuerpo al caer, mi alma no siente alivio de tu
amor. He de perecer por siempre viendo tu mano sin alcanzarme y mi amor sin
poder morir.
Nota:
envíe sus poemas a culturalibrosyletras@gmail.com
y pedimos el favor que estos no sean tan extensos; máximo 30 versos.
envíe sus poemas a culturalibrosyletras@gmail.com
y pedimos el favor que estos no sean tan extensos; máximo 30 versos.