El Rincón del Poeta

Primavera en el barrio
               Eduardo Pérsico (Argentina)
     El setiembre encendido de luz y veintiuno
es un vaso hasta el borde de un vino gusto a ganas.
     Disfruta una muchacha el pelo a contraviento
 y el pródigo despliegue de su blusa floreada.
     Es que el aire deshace casi como al descuido
el nudo abigarrado que tejiera el invierno.
    Y el cielo de mi barrio, tan modesto y discreto,
hoy reluce en destellos de adornar el paisaje.    
  
    Tras acortar su falda por cortejar el día  
mi vecina sonríe a un guiño cuando pasa. 
    Si el clima o un tal vez pudiera convencerla   
de aflojar ya las riendas que luego es el olvido…  
   
     Así que en el festejo de soles derramados
aguardo que los duendes sensuales y sanguíneos
le indiquen nuestra arcaica sugestión al cruzarnos:        
    la erótica mirada de la especie desnuda. 

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